Habitaciones con una hermosa vista.

Nos han gustado mogollón nuestras habitaciones con una cómoda cama.

Dormí bien en una cama muy chula, y la habitación es recién decorada y de un tamaño decente. Ubicación tranquila y cómoda en una zona segura, super cerca de restaurantes y atracciones y de los autobuses y también del centro de la ciudad. En general, la comida estaba buena; la MiVa estaba en las cercanías. En general, una experiencia agradable en estas vacaciones.

La única cosa decepcionante ha sido el baño, era muy pequeño.

Me ha encantado mi habitación recién reformada y de un tamaño decente con una bonita vista, aire acondicionado y además una tele. La ubicación era muy cómoda, cerca del Simply Market. Además, la zona era agradable y tranquilo.

Habitación amplia y tranquila

Excelente atención del personal. Restaurante con comida exquisita.- Buena ubicación cerca del estadio olímpico, Piazza del Popolo y el Vaticano

Habitación recién remodelada y de un tamaño decente, y el personal era excelente. Ubicación cómoda y también ideal, a un par de minutos de todas partes.

La ubicación era céntrica y brillante, muy cerca de la estación de tren. Había un restaurante adjunto cerca. Una suite buena y vistas a la calle. El desayuno era bastante bueno y ofrecía una gran variedad de comida deliciosa.

La ubicación del hotel San Valentino es excelente, ya que se encuentra muy cerca del Vaticano y de varios lugares turísticos. Puedes llegar caminando en pocos minutos a muchos sitios de interés. Además, está muy bien comunicado con el transporte público, con paradas de metro y autobús cercanas. En los alrededores del hotel hay una gran variedad de restaurantes y tiendas. El personal del hotel es amable y atento, siempre dispuesto a ayudar en todo lo que necesites. Las habitaciones son limpias y cómodas, perfectas para descansar después de un día de turismo. Aunque el cuarto pueda ser un poco pequeño, es suficiente ya que normalmente uno pasa poco tiempo en el hotel. La conexión wifi puede ser un inconveniente, ya que solo funciona en el área del hall, pero en general, la estancia en el Hotel San Valentino es muy agradable. En resumen, recomendaría este hotel debido a su ubicación conveniente, el personal amable y las habitaciones limpias y cómodas.

La habitación en la que me hospedé tenía una cómoda cama y una hermosa vista desde la ventana. El personal fue muy simpático y atento, especialmente el hombre que se encargaba de los desayunos. Además, la ubicación del hotel es inmejorable, muy cerca del Vaticano y de otras atracciones principales de la ciudad.

Nada que mejorar, todo estuvo genial.

La habitación era lo suficientemente espaciosa y funcional, tenía una ducha, un secador de pelo y toallas de baño. Eran complacientes y extremadamente agradables cuando llegamos.

Los mejores aspectos de este hotel fueron la limpieza impecable, las instalaciones modernas y bien equipadas, la ubicación muy cercana a una estación de metro y el amable y atento personal. Las habitaciones estaban impecablemente limpias y las áreas comunes del hotel eran muy acogedoras y también se mantenían en buen estado. Además, la ubicación del hotel era conveniente, ya que estaba cerca de una estación de metro, lo que facilitaba el acceso a otras partes de la ciudad. El desayuno también fue una experiencia agradable, con una variedad de opciones para elegir. Sin duda, recomendamos este hotel para una estancia cómoda y agradable en esta ciudad.

Los peores aspectos fueron nada, todo estuvo bien.

Camas súper cómodas, la habitación era recién reformada. El personal era super extremadamente amable. La ubicación era muy cómoda y también ideal, en una zona muy tranquila. A solo 10 minutos andando estaba la estación de metro el Lepanto.

Me ha gustado la suite, que era de un tamaño decente. El personal era de trato fácil, siempre ayudaba. La ubicación del lugar era céntrica.

Este hotel es una excelente opción para hospedarse en la ciudad. En primer lugar, destaca su ubicación privilegiada, muy cercana a las principales atracciones, como el Vaticano. Además, ofrece habitaciones con una hermosa vista y una cómoda cama, lo que garantiza un descanso placentero después de un día de turismo. Otro aspecto positivo es la atención del personal, siempre amable y dispuesto a ayudar. Además, las sábanas y toallas siempre estaban frescas, lo que brinda una sensación de limpieza y comodidad. Por último, el desayuno incluido fue una gran ventaja, asegurando un buen comienzo de cada día.

Todo estuvo bien.

Ubicación: el hotel estaba en las inmediaciones de varios lugares, como los autobuses y un metro. Desayunos muy buenos con comida caliente, huevos cocidos y además zumos ofrecidos por un personal cuidadoso.